El chantaje, la mentira y la presión se hacen presentes, una vez más, para cumplir con la orden del presidente Rafael Correa de concentrar al menos a 50.000 personas para enfrentar a la marcha por el agua, la vida, la soberanía y la dignidad de los pueblos, que este jueves arribará a Quito. Mediante oficio de este 14 de marzo, Carlos Chilán, presidente del Consejo Nacional de Gobiernos Parroquiales Rurales (CONAGOPARE), dispone a todo “cuerpo legislativo, personal administrativo, a más de la población, grupos y comunidades de su territorio” de los gobiernos parroquiales asistir el 22 de marzo a la ciudad de Quito, a un supuesto “día de fortalecimiento y promoción del desarrollo comunitario y la unidad de los asentamientos rurales y organizaciones territoriales de base”, en el que se solicitaría al presidente Rafael Correa aumento presupuestario para cada gobierno parroquial.
Este documento demuestra el grado de desesperación que tiene el régimen ante la movilización, y la ausencia de escrúpulos en manipular a la gente para dar la impresión de que el gobierno cuenta con un gran respaldo popular.
Esto confirma la necesidad y la justeza de la acción popular, que lo único que busca es defender los derechos de los pueblos y ampliar las libertades democráticas en el Ecuador.
