Salvador Quishpe, prefecto de Zamora Chinchipe y precandidato presidencial de Pachakutik, expresó que en el marco de la Coordinadora Plurinacional por la Unidad de las Izquierdas se incluye la implementación de políticas públicas para poner en práctica la equidad social y la producción, para satisfacer las necesidades de la seguridad y la soberanía alimentaria de los ecuatorianos.
El precandidato, originario del milenario pueblo Saraguro, al ser interrogado sobre el llamado de la ministra Doris Solís, de debatir propuestas que erradiquen la pobreza, dijo que el gobierno del Presidente Rafael Correa y sus ministros no tienen calidad moral para pedir a esta altura del tiempo debatir con seriedad políticas para erradicar la pobreza en el Ecuador, toda vez que la única política que tiene para resolver este problema es la del bono de la pobreza. Para ello se ha destinado millones de millones de dólares a más de 2 millones de ecuatorianos que, por recibir dicha contribución, estos millones de ciudadanos ni siquiera pueden ejercer libremente un trabajo en el sector público o incluso privado.
Lo que ha hecho el gobierno es educar a millones de ecuatorianos a vivir miserablemente y en dependencia del estado. Seguramente para el Gobierno de Rafael Correa el debate se limitará a ver quién de los pre-candidatos da más al bono de la miseria, eso evidentemente no será un debate responsable. Por lo tanto, las palabras de la ministra Solís no tienen ningún contenido serio como para dar la importancia que merece el tema, sostuvo Salvador Quishpe.
Quishpe dijo que este es un tema que merece discutir integralmente, ya que pasa por el nivel de educación que recibimos los ecuatorianos. Pero esto no se consigue cerrando universidades, sino dotándoles de tecnología, maestros de calidad e infraestructura; revisando la distribución económica y orientando mayores recursos del Presupuesto General del Estado a la producción y generación de empleo en el Ecuador.
A criterio de Quispe, no es nada bueno para el Ecuador seguir importando el 98% del trigo de la Argentina, Canadá y Estados Unidos. Desgraciadamente la “revolución” verde limón de Correa ha privilegiado los negocios de los productores de dichos países y del magnate Álvaro Noboa, ya que es él quien controla el gran negocio de la harina en Ecuador. “Pues hay que invertir en el riego y en tecnologías para reactivar los campos del país y volver a sembrar trigo, no solo para abastecer el consumo interno de la nación, sino incluso para exportar sus excedentes, tal como lo hacíamos antes de la vida petrolera de nuestro país”.
Agregó que para salir paulatinamente de la pobreza hay que revisar el uso y la distribución de la tierra, del agua. “No se puede garantizar equidad dictando leyes para avalar la privatización del agua a favor de INTERAGUA controlado por los ‘pelucones’ y personajes del poder como Jaime Nebot. Esto lo está haciendo Correa en flagrante contradicción de su discurso y a la Constitución”.
Finalmente, el precandidato presidencial aseguró que para salir de la pobreza hay que hablar con la comunidad internacional a fin de dictar políticas comerciales que compensen la inequidad y perjuicio que ha sufrido nuestro país históricamente. “Estos son, entre otros, los asuntos que se debe debatir; pero está claro que Rafael Correa y su gobierno ya no tienen la oportunidad de hacerlo, pues, tuvieron 5 años para implementar dichas políticas y, sin embargo, se han dedicado a gastarse la plata del pueblo ecuatoriano en interminables propagandas que absorbe millones de dólares, promocionando una falsa revolución”, expresó Salvador Quishpe Lozano.
El precandidato, originario del milenario pueblo Saraguro, al ser interrogado sobre el llamado de la ministra Doris Solís, de debatir propuestas que erradiquen la pobreza, dijo que el gobierno del Presidente Rafael Correa y sus ministros no tienen calidad moral para pedir a esta altura del tiempo debatir con seriedad políticas para erradicar la pobreza en el Ecuador, toda vez que la única política que tiene para resolver este problema es la del bono de la pobreza. Para ello se ha destinado millones de millones de dólares a más de 2 millones de ecuatorianos que, por recibir dicha contribución, estos millones de ciudadanos ni siquiera pueden ejercer libremente un trabajo en el sector público o incluso privado.
Lo que ha hecho el gobierno es educar a millones de ecuatorianos a vivir miserablemente y en dependencia del estado. Seguramente para el Gobierno de Rafael Correa el debate se limitará a ver quién de los pre-candidatos da más al bono de la miseria, eso evidentemente no será un debate responsable. Por lo tanto, las palabras de la ministra Solís no tienen ningún contenido serio como para dar la importancia que merece el tema, sostuvo Salvador Quishpe.
Quishpe dijo que este es un tema que merece discutir integralmente, ya que pasa por el nivel de educación que recibimos los ecuatorianos. Pero esto no se consigue cerrando universidades, sino dotándoles de tecnología, maestros de calidad e infraestructura; revisando la distribución económica y orientando mayores recursos del Presupuesto General del Estado a la producción y generación de empleo en el Ecuador.
A criterio de Quispe, no es nada bueno para el Ecuador seguir importando el 98% del trigo de la Argentina, Canadá y Estados Unidos. Desgraciadamente la “revolución” verde limón de Correa ha privilegiado los negocios de los productores de dichos países y del magnate Álvaro Noboa, ya que es él quien controla el gran negocio de la harina en Ecuador. “Pues hay que invertir en el riego y en tecnologías para reactivar los campos del país y volver a sembrar trigo, no solo para abastecer el consumo interno de la nación, sino incluso para exportar sus excedentes, tal como lo hacíamos antes de la vida petrolera de nuestro país”.
Agregó que para salir paulatinamente de la pobreza hay que revisar el uso y la distribución de la tierra, del agua. “No se puede garantizar equidad dictando leyes para avalar la privatización del agua a favor de INTERAGUA controlado por los ‘pelucones’ y personajes del poder como Jaime Nebot. Esto lo está haciendo Correa en flagrante contradicción de su discurso y a la Constitución”.
Finalmente, el precandidato presidencial aseguró que para salir de la pobreza hay que hablar con la comunidad internacional a fin de dictar políticas comerciales que compensen la inequidad y perjuicio que ha sufrido nuestro país históricamente. “Estos son, entre otros, los asuntos que se debe debatir; pero está claro que Rafael Correa y su gobierno ya no tienen la oportunidad de hacerlo, pues, tuvieron 5 años para implementar dichas políticas y, sin embargo, se han dedicado a gastarse la plata del pueblo ecuatoriano en interminables propagandas que absorbe millones de dólares, promocionando una falsa revolución”, expresó Salvador Quishpe Lozano.
