La denominada campaña de socialización emprendida por Senplades para analizar y debatir la propuesta de reorganización territorial y la búsqueda de consensos para que sea Loja la capital de la región siete, supuestamente conformada por las provincias de El Oro, Loja y Zamora Chinchipe, enfrenta las primeras reacciones de parte de las principales autoridades de estas provincias, que frente a esta iniciativa mantienen posiciones diferentes, que en ningún caso favorecen las tesis o argumentos expuestos por determinadas personas que han usurpado la calidad de voceros de la visión y los intereses de los lojanos.
Uno de los argumentos para la reorganización territorial horizontal y para que Loja sea la capital o sede de esta unidad geográfica, según el ex alcalde lojano Bolívar Castillo, mentor de uno de los proyectos de reordenamiento territorial, es que las provincias de El Oro, Loja y Zamora Chinchipe constituyen una unidad histórica y geográfica desde antes de la conquista incásica y su desarrollo será absolutamente complementario. “Todo nuestro potencial turístico, biológico, agropecuario, minero, industrial, artístico, científico, etc., tiene que ser puesto en marcha, sin este concurso de trabas burocráticas que nos hemos inventado”, según el criterio de Castillo.
La provincia de El Oro, a través del prefecto Montgomery Sánchez, considera que esta provincia debe mantener una posición firme ante la regionalización propuesta por la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo. Propone la regionalización entre seis provincias: El Oro, Loja, Zamora Chinchipe, Morona Santiago, Cañar y Azuay. La opción que plantea Sánchez es ubicarla en el origen del río Jubones, porque es el punto donde la provincia limita con el Azuay y por la importancia de los proyectos que se desarrollan, aprovechando las aguas de esta vertiente.
Carlos Fálquez, alcalde de Machala, considera que tanto la ciudad de Machala como la provincia de El Oro, más allá de buscar una capital para la región, se debe pensar y respetar lo que el soberano manifestó en las urnas en la consulta popular realizada el año 2000, en la que se planteó la autonomía para la provincia de El Oro.
La regionalización horizontal propuesta por la Secretaría Nacional de Planificación tampoco convence al prefecto electo de la provincia de Zamora Chinchipe, Salvador Quishpe, porque el artículo 250 de la nueva Constitución Política del Estado establece que las provincias amazónicas constituirán una circunscripción territorial especial para la que existirá una planificación integral recogida en una ley específica que incluirá aspectos sociales, económicos, ambientales y culturales, con un ordenamiento territorial que garantice la conservación y protección de sus ecosistemas y alcanzar el principio del sumak kawsay (del buen vivir). De acuerdo a este precepto constitucional, los habitantes amazónicos aspiran a que esta región tenga su propia Ley Especial para la Amazonía, que permita a los gobiernos autónomos y descentralizados adoptar políticas de desarrollo sustentable que compensen las ancestrales iniquidades cometidas en contra de esta relegada región, principal sostén de la economía del país.
Fuente: Diario La Crónica
Pedro Piedra pedropiedra@hotmail.com
Uno de los argumentos para la reorganización territorial horizontal y para que Loja sea la capital o sede de esta unidad geográfica, según el ex alcalde lojano Bolívar Castillo, mentor de uno de los proyectos de reordenamiento territorial, es que las provincias de El Oro, Loja y Zamora Chinchipe constituyen una unidad histórica y geográfica desde antes de la conquista incásica y su desarrollo será absolutamente complementario. “Todo nuestro potencial turístico, biológico, agropecuario, minero, industrial, artístico, científico, etc., tiene que ser puesto en marcha, sin este concurso de trabas burocráticas que nos hemos inventado”, según el criterio de Castillo.
La provincia de El Oro, a través del prefecto Montgomery Sánchez, considera que esta provincia debe mantener una posición firme ante la regionalización propuesta por la Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo. Propone la regionalización entre seis provincias: El Oro, Loja, Zamora Chinchipe, Morona Santiago, Cañar y Azuay. La opción que plantea Sánchez es ubicarla en el origen del río Jubones, porque es el punto donde la provincia limita con el Azuay y por la importancia de los proyectos que se desarrollan, aprovechando las aguas de esta vertiente.
Carlos Fálquez, alcalde de Machala, considera que tanto la ciudad de Machala como la provincia de El Oro, más allá de buscar una capital para la región, se debe pensar y respetar lo que el soberano manifestó en las urnas en la consulta popular realizada el año 2000, en la que se planteó la autonomía para la provincia de El Oro.
La regionalización horizontal propuesta por la Secretaría Nacional de Planificación tampoco convence al prefecto electo de la provincia de Zamora Chinchipe, Salvador Quishpe, porque el artículo 250 de la nueva Constitución Política del Estado establece que las provincias amazónicas constituirán una circunscripción territorial especial para la que existirá una planificación integral recogida en una ley específica que incluirá aspectos sociales, económicos, ambientales y culturales, con un ordenamiento territorial que garantice la conservación y protección de sus ecosistemas y alcanzar el principio del sumak kawsay (del buen vivir). De acuerdo a este precepto constitucional, los habitantes amazónicos aspiran a que esta región tenga su propia Ley Especial para la Amazonía, que permita a los gobiernos autónomos y descentralizados adoptar políticas de desarrollo sustentable que compensen las ancestrales iniquidades cometidas en contra de esta relegada región, principal sostén de la economía del país.
Fuente: Diario La Crónica
Pedro Piedra pedropiedra@hotmail.com