El asambleísta de Pachakutik, Cléver Jiménez, condenó la brutal represión y crímenes de estado, ordenados por Muammar al-Gadafi, presidente de Libia, en contra del pueblo de ese país. Así mismo, exige al gobierno de Rafael Correa, sumarse a la condena internacional en contra de este genocidio; y adicionalmente, demanda al régimen una explicación de los acuerdos alcanzados entre los gobiernos de Ecuador y Libia.
El asambleísta solicitó formalmente al Ministerio de Relaciones Exteriores, todos los convenios y acuerdos firmados entre Correa y Gaddafi, porque según Jiménez, existe una empatía política entre ambos gobiernos, coincidentes con las actuaciones dictatoriales.
En su análisis, Jiménez, puntualiza que la rebelión del pueblo libio y demás pueblos árabes y africanos, es una clara muestra, de que todas las sociedades del planeta rechazan cualquier tipo de dominación y dictadura; el ser humano ratifica su afán libertario y condena las expresiones totalitarias y absolutistas, vengan de donde vengan, por más revolucionarios que quieran calificarse sus dignatarios; “una revolución no baña en sangre a su pueblo”, dijo.
La condena internacional de casi la totalidad de países y organismos internacionales del mundo, debe motivar al gobierno nacional a condenar la masacre ordenada por el dictador Gaddafi. Jiménez también se mostró partidario de garantizar la autodeterminación del pueblo libio, y rechazó toda forma de injerencia extranjera.
Los acontecimientos que suceden en Libia, y en varios países árabes y africanos, debe conminar a Rafael Correa, a repensar sus actitudes dictatoriales en nuestro país, concluyó Jiménez.
El asambleísta solicitó formalmente al Ministerio de Relaciones Exteriores, todos los convenios y acuerdos firmados entre Correa y Gaddafi, porque según Jiménez, existe una empatía política entre ambos gobiernos, coincidentes con las actuaciones dictatoriales.
En su análisis, Jiménez, puntualiza que la rebelión del pueblo libio y demás pueblos árabes y africanos, es una clara muestra, de que todas las sociedades del planeta rechazan cualquier tipo de dominación y dictadura; el ser humano ratifica su afán libertario y condena las expresiones totalitarias y absolutistas, vengan de donde vengan, por más revolucionarios que quieran calificarse sus dignatarios; “una revolución no baña en sangre a su pueblo”, dijo.
La condena internacional de casi la totalidad de países y organismos internacionales del mundo, debe motivar al gobierno nacional a condenar la masacre ordenada por el dictador Gaddafi. Jiménez también se mostró partidario de garantizar la autodeterminación del pueblo libio, y rechazó toda forma de injerencia extranjera.
Los acontecimientos que suceden en Libia, y en varios países árabes y africanos, debe conminar a Rafael Correa, a repensar sus actitudes dictatoriales en nuestro país, concluyó Jiménez.
Fuente: Ecuador en Vivo
